lunes, 25 de enero de 2021

Escondite

Cortesía de DMA.

Ronda, ronda,
el que no se haya escondido,
que se esconda,
que ya voy.


 

18 comentarios:

Kasioles dijo...

Con tu entrada me recuerdas que los años han pasado a gran velocidad, atrás se han quedado los tiempos de mi niñez en que jugaba al escondite.
Cariños y buen comienzo de semana.
kasioles

LA ZARZAMORA dijo...

Et, quand le chat n'est pas là, les souris dansent...
;)

Bises cache-cache, murcianico.

Pitt Tristán dijo...

El gato cojín.

Cuidado no lo chafes.

Saludos.

Fackel dijo...


En los veranos de mi infancia del Norte los niños emigrantes de Andalucía que habían llegado con sus familias (eran las primeras remesas para empujar allí el desarrollismo) me enseñaron esta canción:


"Ni una ni dó ni tré ni catoni cinco quinienta / estaba la reina sentá en su silleta / picandóla / el que no se ha escondido que se esconda"

(Transcribo por la dicción que yo percibía)

VENTANA DE FOTO dijo...

Si miras bien, encuentras la parte que se ha ovidado de ocultar.

Besos

José Ramón dijo...

Interesante imagen Saludos

Mara dijo...


El gato listo sabe elegir el calorcito en tiempos de frío, solo que si alguien se sienta de repente... Por algo dejó su cola al descubierto para avisar. saludos.

Margarida Pires dijo...

Obrigada Dyhego!
Pela visita ao meu cantinho!
E ficava - me pelo rato e pelo gato!
Beijinhos!
Megy Maia😗🌞😗

Joaquina Witchcraft dijo...

Una corta frase y una imagen, me han traido mi infancia.
Saludos!

Dyhego dijo...

Kasioles:
fuimos afortunados los que jugamos a estos juegos tan simples y divertidos. ¿Seguirán jugando a esto los niños actuales?
Salu2.

Dyhego dijo...

Zarzamora:
oui, les souris dansent parce que quand le chat apparaît...
Salu2 chatiens.

Dyhego dijo...

Tristán:
alguna vez nos hemos sentado encima de ella sin querer...
Pero llevamos mucho cuidado, por supuesto.
Salu2.

Dyhego dijo...

Fáckel:
¡madre mía, la de años que no escuchaba esta cancioncilla!
De hecho, no la recordaba hasta haberla leído.
Gracias por traérmela a mi memoria.
Yo la cantaba así:
uni, doni, teni, catoni, quini, quineta, iba la reina montá en su silleta, vino Gil y apagó el candil, candil, candilón, cuenta hasta veinte que las veinte son.
¡Qué tiempos!

Salu2.

Dyhego dijo...

Antonia:
la misma inocencia que la de esos niños que se tapan sólo la cabeza y piensan que se han escondido...
Salu2 inocentes.

Dyhego dijo...

Ramón:
fue pillada en un renuncio, jajaja.
Salu2.

Dyhego dijo...

Mara:
quizás fue así. Como en otras ocasiones, sin querer, nos hemos sentado encima, ha pensado que mejor dejan un indicio de que está ahí...
Salu2.

Dyhego dijo...

Megy:
se parece al gato de esa marca portuguesa tan conocida: a loja do gato preto.
Beijinhos.

Dyhego dijo...

Carla:
siempre es bueno recordar la infancia, si ha sido feliz, claro.
Salu2.