martes, 18 de mayo de 2021

Caperucita empoderada.

Fotografía de Diego Morales. Colección de sellos .

 

- Caperucita empoderada era una niña, pero no tan niña porque, de serlo, Servicios Sociales habrían empapelado a la madre y al padre por negligencia en la educación de una menor. Su madre le encomendó la tarea de ir a visitar a la abuela, pero no para llevarle comida, lo cual hubiese sido una perpetuación del papel femenino, como cuidadora y criada, además de explotada laboral. Iba acompañada de otro niño, pero de su misma edad y, por supuesto, no porque tuviese necesidad de ir vigilada o protegida (otra perpetuación del papel femenino como ser desprotegido y protegible) sino porque en un cuento paritario tienen que aparecer figuras masculinas y femeninas en igualdad de condiciones, derechos y oportunidades.

Un  lobo merodeaba por la casa de la abuela porque tenía hambre debido a la presión que esta raza soporta por parte de los cazadores y de los ganaderos, pero la abuela, lejos de sentir miedo (papel femenino) decidió darle de comer para amansarlo y revertir sus instintos (que no son instintos naturales sino aprendidos por obra de la sociedad patriarcal).

Los niños aprendieron una valiosa lección de amor por la naturaleza y por los animales. Alimentaban al lobo y se hicieron amigos. No hubo que matar a ningún ser vivo y todos  y todas vivieron felices y felizas, contentos y contentas.

-¡Vaya una mierda de cuento, papi! Mejor me voy a jugar a la play, que allí hay muertos y muertas y muertes con sangre y todo.


10 comentarios:

Conchi dijo...

¡Que cambiazo le has dado al cuento! Muy de actualidad Dyhego.

Saluditos.

emejota dijo...

Jaaajjjj. Eso, eso, a promover la blandengueria, aparéntemente el modo “modelno” y cobarde para eliminar masas caducas, o no.? “Toos pal mismo saco, que sobra demasiada biología cegatona.”
Al menos algunos lo advierten inteligentemente, gracias a la susodicha biología xx y xy precisamente!

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

Es una reacción acertada a ese pensamiento, que no deja disfrutar de la ficción, tal vez porque no la entienden.
Por lo menos, aún no han llegado a los videojuegos.

Saludos.

CarlosMxAx dijo...

Jajaja
El cuento de La Caperucite Roje, de cuando fue a ver a su Abuelite, y se encontró en el camino al Lobe Ferez...



Saludos!!!

(... y si mejor mejor juguemos la Play a matar zombies...)

VENTANA DE FOTO dijo...

Has transformado el cuento, para adaptarlo al mundo de ahora.

Besos

Dyhego dijo...

Conchi:
por lo que se ve, ahora los cuentos tienen que ser así, asépticos, igualitarios, inclusivos, buenistas y todo eso.
Salu2.

Dyhego dijo...

Emejota:
a los niños les gustan los cuentos con personajes claros: buenos y malos. Cuando sean mayores sabrán entender y discernir.
Se supone que los padres tienen más de dos dedos de frente para ir adaptando los cuentos a la edad de sus hijos.
Y, por otro lado, los niños viven en su realismo mágico y todo les parece "posible".
Salu2.

Dyhego dijo...

Demiurgo:
en los cuentos siempre ha habido buenos y malos y no hace falta tanta monserga buenista. Hay que adaptarlos, por supuesto, pero no con toda esta batería de medidas tan ridículas.
Salu2.

Dyhego dijo...

Carlos:
ya el cazador, en realidad era un veterinarie que le pone una inyección al lobo y se lo lleva a una reserva para que viva feliz...
Salu2.

Dyhego dijo...

Antonia:
por lo que se ve, es la moda actual de cuentos inclusivos, en los que hay que hacerlo todo tan buenista que no hay malos.
En fin, siempre ha habido tontos.
Salu2.