Fotografía y montaje de Diego Morales. |
Se trata de una novela predecible, escrita así, como sin ganas. Un lenguaje anodino, una trama soporífera, personajes planos de cartón piedra y situaciones grotescamente inverosímiles.
Si pagas un 3% más te regalan una rosa de plástico de color gualda.
2 comentarios:
Resumiendo, no vale la pena molestarse en leerla.
Se te echará en falta.
Pero para cuando puedas volver, aquí estaremos para darte un abrazo de bienvenida.
Cariños.
kasioles
Gracias, Kasioles.
Me reconforta ese "abrazo de bienvenida".
Intentaré ser frecuente, pero no sé si podré.
Muchas gracias.
Salu2 culinarios.
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