lunes, 15 de agosto de 2016

Memoriados y desmemoriados

Fotografía y montaje de Diego Morales

Recientemente he leído un libro muy interesante de Santiago Posteguillo, titulado La noche en que Frankenstein leyó El Quijote (Planeta, 2012).
Cuenta anécdotas relacionadas con la literatura en general y es muy ameno. ¿Sabían ustedes que en Dublín...? No, tranquilos, que no me gusta destripar argumentos.
El primer capítulo lo dedica a Zenodoto de Éfeso.
Y a raíz de esta anécdota me puse a pensar en la manía que le tienen algunos pedagogos (esos progres que dicen "chaval" y van de colegas)a la memoria.
Aprenderse el abecedario requiere un esfuerzo, sin duda. ¡Anda que no hemos canturreado todos en la escuela el a b c...! ¡Según estos sabelotodos deberíamos de estar todos traumatizados o a punto de convertirnos en neuróticos irrecuperables! 
Y, sin embargo, los beneficios son enormes. Todo está ordenado por orden alfabético y nos resulta sumamente cómodo buscar un libro en una biblioteca, o una receta de cocina en un recetario, o una palabra en el diccionario.
Los afines a esos sabiondos dirán: pero si el móvil nos ordena los contactos automáticamente. Pero si tecleamos en google una palabra y nos lleva al artículo que queremos...
Sí, pero, ¿está de más saberse de memoria el abecedario?
¡Y no digamos nada de las tablas de multiplicar! ¡Menudo suplicio en la escuela! Pero, repito, ¿hay alguien ingresado en un frenopático a consecuencia de haberse aprendido de memoria las dichosas tablas?
Hace poco fui a comprar unos pollos asados (porque no tenía ganas de cocinar, dicho sea de paso)y la chica que me atendía en el negocio familiar se equivocó en la cuenta (a mi favor) [4 pollos a 8€ = 29€], pero la madre, que se las había aprendido de memoria en la escuela, la regañó y salvó la economía del negocio... 
Eso sí, aprenderme de memoria la lista de los reyes godos... va a ser que no...

12 comentarios:

Tracy dijo...

ABCDE....

Liliana dijo...

Jajaja me has hecho recordar las veces que iba en el coche con mi mamá y "cantábamos" todo el camino las tablas!!! Me encantaba por cierto =)))))

Saludos 😉

LA ZARZAMORA dijo...

Claro, y luego cuando hoy te quedas sin móvil adiós contactos... antes nos sabíamos cantidad de números de memoria de los fijos y nada que todos acabaremos con "alpiste" un poco de alzheimer y mucho despiste...
;)

Bizz inoubliables, murcianico.

jfbmurcia dijo...

El aprendizaje tiene muchos caminos. Yo destacaría el valor de los profesores que saben enamorarte y emocionarte con todo aquello que pretenden enseñar. Los maestros que te dejan con la boca abierta. Yo tengo a alguno de ellos grabado a fuego en mi vieja cabezota. Y todavía me emociono al recordarlos. Saludos.

Pedro Luso de Carvalho dijo...

Lendo o seu texto, Dyhego, vejo que se trata de um livro agradável de ser lido. Vou ver se já está em nossas livrarias.
Um abraço.

amoristad dijo...

Como va a sustituir una máquina el placer de aprender aunque luego se olvide,como me pasa a mi ...Un abrazo 4x4= to' terreno !!

Dyhego dijo...

Tracy:
se nota que fuiste una alumna aplicada.
Salu2 memoria2.

Dyhego dijo...

Liliana:
la más difícil es la del 7, y con diferencia, jajajaja.
Salu2 multiplica2.

Dyhego dijo...

Zarzamora:
es curioso que los mismos psicopedagogos que desaconsejan la memorización en los niños la aconsejen para los abuelos...
El caso es incordiar...
Salu2 memorísticos.

Dyhego dijo...

Jfb:
todos recordamos a más de un profesor así.
Así intento ser...
Salu2 educativos.

Dyhego dijo...

Pedro:
a mí me ha parecido un libro interesante.
Muito obrigado, muito.
Salu2 brasileiros.

Dyhego dijo...

Amoristad:
a mí también me da mucha rabia olvidar cosas que aprendes con gusto.
Salu2 multiplica2.