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Fotografía de Diego Morales. |
Ahora me han vuelto las ganas y voy a retomar la cosa filatélica.
Primero tengo que separar el sello del papel de todas las piezas que tenía aprisionadas en cajitas y sobres. Después pensaré en qué criterios utilizaré para ordenarlos. A continuación separaré los repetidos y pensaré qué hago, si venderlos o regalarlos. Más tarde compraré álbumes para guardarlos. He visto unos muy bonitos en esa tienda de venta a distancia, pero como quiero contribuir al comercio de cercanías, tendré que esperar a ir a la ciudad.
Ahora que ya la gente no escribe, me costará conseguir nuevos sellos.
8 comentarios:
Yo coleccionaba postales con su sello y su historia. No sé ni qué hice con ellas. Saludos.
También he coleccionado postales, ya tenía tantas, que no sabía dónde meterlas.
Besos
Seguro entre las cartas que tienen mis viejos encuentro estampillas de ese estilo. Esas cartas que les llegarían a mis abuelos o a mis viejos mismos, de cuando tenían media familia en Galicia, y la otra mitad por acá por Argentina
Abrazos!
Mes cartes postales dorénavant seront plus que croustillantes.
Bizz timbrées :))) murcianico.
Jfb:
también tengo muchas postales, pero ésas se quedarán en sus cajas...
Salu2.
Antonia:
es lo malo, que no tenemos, por lo menos yo, casa grande donde poder guardar los recuerdos que a un le gustan.
Salu2.
Frodo:
las estampillas son bonitas, fáciles de coleccionar y difíciles de encontrar...
¡Seguro que tú coleccionas naipes...!
Salu2.
Zarzamora:
esos sellos no los puedo utilizar porque no quiero romper las postales. Y si sumerjo en agua la parte donde están pegados, se corre el riesgo de que se corra la tinta...
Pero siempre estarán ahí.
Salu2 timbreux.
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