lunes, 13 de junio de 2022

Escondite.

Fotografía de Diego Morales.

 ¡Ronda, ronda,
el que no se haya escondido
que se esconda
que
ya
voy!

10 comentarios:

Ana Mª Ferrin dijo...

Hola, Dyhego.

Esa mecedora parece contar muchas historias a la vez. Cuántos pensamientos y análisis. Cuánta imaginación acunando el sopor que lleva al sueño. Cuánta vida.
Saludos.

Fackel dijo...

Y fue. De Ir y de Ser. Riqueza de nuestra lengua. ¿Te das cuenta de cuánto hay detrás? Es lo interesante del escondite, que es dinámico y no cría telarañas.

Matías dijo...

Ahí no, que no tiene aire acondicionado.

CarlosMxAx dijo...

Es un lindo gatito???
Si si es un lindo gatito....

Dyhego dijo...

Ana:
las mecedoras son sitios ideales para leer, charlar y echar un sueñecito. También para los gatos, jajaja.
Salu2.

Dyhego dijo...

Fáckel:
el escondite es un juego que siempre fascina a los niños. Quizás porque consiguen perder de vista a los padres sabiendo que siguen ahí...
Me ha recordado la inocencia de los peques, que se tapan los ojos y creen que ya se han escondido...
Salu2.

Dyhego dijo...

Matías:
muy necesario en estos tiempos, sin duda.
Salu2.

Dyhego dijo...

Carlos:
en este caso una gata, y ya entradita en años.
Salu2.

Frodo dijo...

jaaaa le quedó un 5% afuera

Dyhego dijo...

Frodo:
como los niños cuando juegan, que también se dejan el pie a la vista...
Salu2.