viernes, 2 de marzo de 2018

Piropo

Fotografía de Diego Morales

Al entrar a la clase me he encontrado con este mensaje. Alumnos a los que no doy clase este curso.
No lo voy a negar, me ha emocionado y me he sentido reconfortado y valorado.
Nada más hacer la foto, un alumno, nuevo, me ha pedido si podía borrar la pizarra.
- Sí, hijo, sí; bórrala ya, que parece que te molesta que haya alguien que me aprecie.

Una de cal y otra de arena, que se suele decir en estos casos.


12 comentarios:

  1. Como ha cambiado el sistema, en mis tiempos poníamos motes a los profes.
    Bueno algunos se salvaban.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  2. Eso es lo que hace reconfortante la enseñanza, a pesar de todos los problemas que tiene.

    ResponderEliminar
  3. Faz bem para a nossa auto-estima, é a valorização dos nossos atos!
    Um ótimo fim de semana, amigo!
    bjs.

    ResponderEliminar
  4. Quédate sólo con lo primero, y obvia lo segundo.
    Yo no hubiese borrado la pizarra...
    Además más que merecido;)

    Bizz magistrales, murcianico.

    ResponderEliminar
  5. Sylvia:
    sí, un subidón. Te hace sentir mejor persona y todo.
    ¡Qué bonicos son algunos alumnos!
    Salu2 bonitos.

    ResponderEliminar
  6. Matías:
    algún mote tendré, seguro, aunque no lo sé. Una vez sí me enteré de un mote que me pusieron.
    salu2 motea2.

    ResponderEliminar
  7. Jfb:
    muchas gracias.
    Salu2 agradeci2.

    ResponderEliminar
  8. Tracy:
    sí, un gesto así, tan sencillo, hace mucho.
    Salu2 escolares.

    ResponderEliminar
  9. Taís:
    siempre es una alegría saber que hay alguien que te aprecia y que te lo dice.
    Ótima semana para vôcé també.
    Beijos.

    ResponderEliminar
  10. Zarzamora:
    sí, eso debería haber hecho, dejar el mensaje durante toda la clase.
    Sólo me he quedado con lo primero. No merece ni pensar en el niño "borrador", bastante tiene con aguantarse así mismo, que es botarate.
    Gracias.
    Salu2 scolaires.

    ResponderEliminar

Tu comentario es una estrella fugaz: refulgente en la noche, permanente en mi recuerdo.