Tecla: en mi casa de la infancia no recuerdo yo que hubiera una mano de esas, pero sí en el pueblo. Cuando era aún más chico, me daban miedo... Salu2 broncea2.
Aquí donde yo vivo no hay ni nunca ha habido, porque es una ciudad joven, pero en el centro del país, sobretodo en los pueblos, como bien dices, sí que hay!
¡¡¡El llamador que había en casa de mi abuela...!!!!
ResponderEliminar¡Qué alegría me ha dado verlo!
Tracy:
ResponderEliminaréste no se si es imitación u original, pero está en una casa muy coqueta.
Ambas duenas (de casa) tenían buen gusto.
:)
Salu2 llama2.
Qué bonito!
ResponderEliminar😉
Saludos Dyhego =))))
No es igual que el de la casa de mi pueblo, pero tiene el mismo color y me encanta.
ResponderEliminarTan entrañables estas piezas de bronce, Dyhego.
Liliana:
ResponderEliminarestos adornos son muy entrañables porque ya sólo se encuentran en los pueblos, y casi que tampoco.
Salu2 broncea2.
Tecla:
ResponderEliminaren mi casa de la infancia no recuerdo yo que hubiera una mano de esas, pero sí en el pueblo. Cuando era aún más chico, me daban miedo...
Salu2 broncea2.
Aquí donde yo vivo no hay ni nunca ha habido, porque es una ciudad joven, pero en el centro del país, sobretodo en los pueblos, como bien dices, sí que hay!
ResponderEliminarSaludos bronceados 😉
Liliana:
ResponderEliminary bien bonitas que son esas manos llamadoras...
Salu2 llama2.
Y si es de cataplines, con amor porfi.
ResponderEliminarUn abrazo.
Yo en mi pueblo, hace unos años, hice varias fotos de aldabas curiosas ^^
ResponderEliminarMe llamaban la atención.
Torcuato:
ResponderEliminarsi fuera de cataplines, daría cosa llamar a esa puerta, jajajaja.
Salu2 llamativos.
K.
ResponderEliminartambién me gusta fotografiarlos.
Salu2 fotografia2.
A ésta ya le habían echao el lazo...
ResponderEliminarY casa con dos puertas, mala es de guardar.
:)
Bizz toc-toc, murcianico.
Zarzamora:
ResponderEliminar¡Y aún con una! Recuerda la jugada maestra de "El celoso extemeño"...!
Salu2 manuels.