viernes, 9 de marzo de 2012

Sangvinisqve pretiosi

Fotografía de Diego Morales

Ayer tocaba donar sangre. Me la extrajo una enfermera muy simpática y habilidosa que no me hizo el menor daño cuando me hincó la aguja, momento que más nervioso me pone.
Después me comí un bocadillo de jamón, me bebí un refresco y me dieron un regalito.
Por asociación de ideas (sangvnisqve pretiosi) me he acordado de este canto, que siempre me ha gustado.

8 comentarios:

  1. Valiente amigo, Dyhego, loable acto-inherente a tí-

    un saludo de mar en viernes!!!

    glup!

    ResponderEliminar
  2. Cuando llegué a París, cuántas veces di mi sangre para que me diesen ese bocata...

    Besos, Dyhego.

    ResponderEliminar
  3. Dondán:
    Totalmente de acuedo con vos.
    Salucos.

    ResponderEliminar
  4. Pececita:
    Gracias. Se hace lo que se puede. Encambio, con la donación de órganos, como que no, me da yuyu.
    Saludos errehaches

    ResponderEliminar
  5. Zarzamora:
    Yo hice un curso de un mes en Grenoble y cenábamos-merendábamos en un "quik". Tenía el dinero divido en los días que iba a estar (12 francos) así que si un día cenaba una hamburguesa y unas patatas fritas por siete francos, 5 francos que me quedaban para el dia siguiente, jejeje.
    Que tiempos.
    Si es que hay dos formas de viajas, o tienes perras o te buscas la vida, jajaja.
    Salu2 galos.

    ResponderEliminar
  6. Me acuerdo del coro del Instituto, que tiempos don Dyhego, que tiempos.

    ResponderEliminar
  7. Menalcas:
    Esta canción siempre me ha gustado. Pero cualquier tiempo pasado, no siempre fue mejor.
    Saludos presentes.

    ResponderEliminar

Tu comentario es una estrella fugaz: refulgente en la noche, permanente en mi recuerdo.